En una tarde de domingo que se presentó a puro sol, en la ciudad de Echeverri se enfrentaron por la 5ta fecha del torneo liguista Atlético y Progreso (haciendo de local) y Atlético Ranchos.
Como ya habíamos adelantado durante la semana, el verdinegro debía ir en busca de los 3 puntos para poder estar tranquilo en su camino a la clasificación, y si esa misma tarde se daban algunos resultados en las otras zonas, asegurarse ya un lugar entre los 8 mejores de la liga. Y esto fue nomas lo que sucedió, Ranchos desde el minuto cero, fue en busca de la victoria, en una cancha de dimensiones pequeñas pero en un excelente estado, “el torito” intentaba poner la pelota al piso y dominar así las acciones del partido. Apenas 4 minutos iban, cuando Ezequiel “el rayo” Avila quedó mano a mano con Cardozo, el 11 cruzó su remate pero fue despejado por el arquero, el rebote lo tomó Alonso, y el 9 no perdonó, desde el vestuario arrancaba arriba el ranchero. A partir de aquí el partido se hizo un poco luchado en la mitad de la cancha, el visitante siguió teniendo chances de aumentar pero sus delanteros andaban erráticos, mientras tanto Progreso, apostaba a la fuerza de su experimentado goleador Martin “topo” López. Ya sobre el final del primer tiempo, el equipo de Basualdo se replegó demasiado en su área y cometió un grave error táctico, dejó correr a un jugador brandseño 40 mts con la pelota sin que nadie saliera a marcarlo, este remató fuerte abajo y Martínez (nuevamente de muy buena actuación) resolvió mandando el balón al córner, el centro cayó en el corazón del área, la pelota quedó boyando y Maresco estampó el empate a los 44 de esta primera parte.
La segunda etapa arrancó parecida a la primera, Atlético Ranchos haciendo control de pelota y Progreso apostando a sus delanteros. Cuando se jugaban 12 minutos de este segundo tiempo, un tiro al arco que más bien pareció centro de Sebastián Díaz se metió por encima de Martínez y puso en ventaja al rojiverde. Con este resultado parcial, la zona se ponía al rojo vivo y complicaba las aspiraciones del verdinegro, rápidamente movió el banco Basualdo y mandó a la cancha a D. Tobio y a G. Guzmán. Mientras tanto el conjunto local aprovechaba la desesperación del ranchero y disponía de un par de situaciones claras de gol que transformaban en figura a Martínez. Sobre el minuto 25 de partido Guzmán recibió la pelota en el área y fue derribado, Valverde no dudó un segundo y marcó penal, Alonso era el encargado de ejecutarlo, el goleador cruzo el remate y Cardozo (un especialista en la materia) se arrojó sobre su palo derecho evitando el empate, segundo penal consecutivo que malogra Atlético Ranchos, el domingo anterior Ferrara se lo había atajado a Vico.
La cosa empezaba a complicarse, los minutos pasaban y Ranchos no conseguía igualar el marcador. Tobio se mostraba movedizo y Guzmán cada vez era más peligroso por la punta izquierda, pero la paridad no lo marcaria ninguno de los 4 delanteros en cancha. El reloj marcaba 35 minutos, cuando luego de un tiro de esquina la pelota no puede ser rechazada por la defensa de Atlético y Progreso, esto es aprovechado por Matías Wooley que de zurda infla la red y las esperanzas rancheras. Ahora si el resultado era un poco más justo, pero este emotivo empate no le servía a ninguno de los 2, mucho menos a los de Brandsen, por lo tanto, en los últimos 10 minutos se iba a ver un partido de ida y vuelta, y en esas idas y vueltas, cuando ya se jugaba tiempo de descuento, Guzmán (de muy buen partido) desbordó por la punta izquierda, envió el centro y “el rayo” Ávila entró solo para empujar el balón al fondo del arco y alimentar la ilusión de todo un pueblo. Final 3 a 2, victoria y clasificación.
Agónica victoria, que sirvió para clasificarse a cuartos de final y también para terminar con una adversa racha sin victorias ante Progreso desde que Ranchos volvió a competir.
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